miércoles, 29 de diciembre de 2010

Odio estar sola.

Siempre he sido de lágrima fácil, aunque hubo unos años en mi vida en los que me endurecí, y las guardaba dentro de mí. Pero de alguna manera hay que exteriorizar por que al final va trasformando el carácter. Al cambiar la situación de mi vida y romper esa coraza que se va formando volví a mi origen. Cuando estoy contenta río, cuando estoy triste lloro, yo lo veo como algo normal, (aunque menos mal que una es de carácter alegre). Hay quién considera signo de debilidad, para mí personalmente cada lágrima que quema mis mejillas me despeja el alma para poder seguir, dejando sitio, expulsando la rabia o él desazón. Cada situación difícil me hace más fuerte. Y es que me gusta la soledad, pero odio estar sola. Me gusta compartir y sobre todo sentir. Sentimental, pasional e impaciente, mala combinación… A veces una está predispuesta, sobre todo cuando sales de una situación de rotura aún cuando la hayas buscado tú. Te crees haberla superado, pero es mentira, sólo te acostumbras a ella. Y de todas maneras no me arrepiento de nada, las decisiones tomadas fueron buenas y positivas. Sé que mucha gente me considera un bicho raro, no es normal dar preferencia a lo sentimental antes que a lo económico. A mí me gustan las cosas que no se pueden comprar, aunque a nadie le amarga un dulce, pero es lo mismo que si no tienes hambre el dulce aún siendo el más exquisito no sabe tan bien. Voy comenzando a creer que debería renunciar a ello. Aceptar que quizás nunca llegue ese ancho cielo y ese eterno mar.

Inexplicablemente para mí hay quién dice no haber llorado nunca, incluso habiendo vivido experiencias muy amargas. Supongo que será alguna manera de protegerse, si no exteriorizas el dolor igual es que no lo sientes. Pero se olvida de algo y es que al nacer el primer acto de su vida fue llorar. En mi caso también es en cierto modo un acto de supervivencia. Si dejo de sentir estoy muerta en vida. Si no eres capaz de llorar hay algo que se a secado, que no fluye. Te vas endureciendo, tu humor empeora…Si no estas dispuesto a romper tu coraza tampoco lo estas de amar. Sólo de querer, y querer es simple necesidad.
Aunque tan solo son ideas que pasan por mi mente, equivocadas o acertadas, simples pensamientos que se trasforman. Me es raro pero aún cuando la esencia es la misma, nunca me veo como la misma persona que fui ayer, no sé si será bueno o malo. Muchas veces tengo la sensación de no ir en la misma dirección que el resto de las personas que me rodean, creo que es simplemente por tener diferente forma de pensar, he intentado seguir la corriente pero me siento muerta como el pez que es arrastrado hacia el mar.
Supongo que hay personas que estamos predestinadas a caminar solas. Bueno, otra cosa más que habrá que aceptar…

2 comentarios:

mikeocean dijo...

No sabes la gran suerte que tienes de poder llorar y desahogarte.Debe ser una liberación.Y no sabes cuánta razón llevas en que,los que no podemos,los que olvidamos cómo llorar,sentimos que nuestro corazón se ha endurecido y nuestra capacidad de desahogarnos se ha secado.Yo también siento que no soy el que fuí.Te entiendo perfectamente lo que quieres decir.Sin embargo,no se puede evitar intuir que en algún rincón de nuestras almas,el ser inocente que fuimos se halla escondido.Quizás lo que tiene es simplemente miedo de volver a salir.Ánimo.

MEVAR dijo...

Bueno, habrá que buscar el equilibrio.
¿Crees que soy inocente?, ¿en que sentido, en no producir daño o en ser ingenua?. Me interesaría saberlo.
Gracias, no pasa nada es normal sentirse un poco mal cuando las circunstancias son difíciles, pero no hay mal que dure mil años (ni cuerpo que lo resista)...